Como parte de la experiencia de participar en la Legalweek en New York los últimos días de enero, tuvimos también la oportunidad de analizar las últimas herramientas tecnológicas que se promueven en el mercado legal global.
En términos generales, es posible señalar que la innovación en materia tecnológica sigue principalmente enfocada en la construcción de soluciones que doten a abogados de mayor eficiencia y efectividad. No son muchas las soluciones que realmente reemplazan al abogado, como muchos intuyen, sino más bien engrandecen su rol al despojarlo de tareas de poco valor agregado, recurrentes, con patrones de ejecución en donde el criterio jurídico y el entrenamiento de los abogados realmente no genera impacto.
Sin perjuicio de que la tendencia de soluciones continúa en la misma línea que años anteriores, obviamente ya podemos visualizar máquinas con más entrenamiento, casos de éxito más certeros y eficiencias indiscutibles. Uno de los exponentes interesantes en esta línea es Lawgeex.com, empresa que ha enfocado sus recursos a la automatización contractual. Ésta ha obtenido múltiples rondas de financiamiento desde su creación y a la fecha acumula más de USD20 Millones en capitalrise. El año 2018 hicieron noticia al hacer competir su herramienta de análisis de documentos y lograr un índice de precisión de más de 94% frente al 85% que demostraron abogados altamente capacitados en un proceso de revisión de NDAs y en donde los abogados demoraron un promedio de 92 minutos en revisar los documentos provistos versus los 26 segundos que demoró la herramienta de AI. Precisamente, tuvimos en nuestra visita oportunidad de conocer y conversar con Noory Bechor, CEO y co-fundador de LawGeex, quien nos manifestó su absoluto foco en procesos de automatización y análisis mecánico de contratos y documentos. Empresas como estas hay varias en el mercado, en efecto, otro buen ejemplo es Luminance.com spinoff de los laboratorios de machine learning de la Universidad de Cambridge que por medio de sus algoritmos de reconocimiento de patrones y modelos de análisis probabilísticos permite intuitivamente recorrer flujos de trabajo en la revisión de documentos, con multilenguaje y multijuridicción, adaptándose a los diversos estilos de redacción documental. En el caso de ésta última, conversamos con sus representantes y realizamos diversas demostraciones que nos permitieron constatar la calidad del producto comercializado.
Por su parte, la mayor preocupación en materia de protección de datos personales, ciberseguridad y cumplimiento normativo, ha dado pie a la creación de herramientas predictivas y de análisis que han visto en este complejo escenario global una gran oportunidad. Ayfie, por ejemplo, con quienes también interactuamos durante la convención, permite efectuar de forma automatizada y potenciada por inteligencia artificial el análisis de millones de datos de forma simultánea. Clasificando datos en función de aquellos criterios que se desee identificar, ordenándolos y detectando divergencia respecto de parámetros predefinidos, es posible encontrar alteraciones en documentos, comunicaciones o información en general que pueda constituir incumplimientos o desviaciones de estándares normativos o regulación a la cuál una empresa se encuentra sometida. Solo es necesario cargar los parámetros a identificar, dotar a la solución de accesos a las bases de datos de información por medio de APIs seguras y voilá, un completo informe puede ser emitidos en segundos.
Otra plataforma con la que nos divertimos durante un rato es TrustArc, una empresa que provee soluciones para administrar políticas de cumplimiento de privacidad bajo estándares como GDPR o CCPA u otras regulaciones de privacidad en el mundo. Básicamente, es una plataforma flexible y adaptable a los estándares normativos que se desee sobre la cuál se pueden construir programas de cumplimiento por medio de la generación de evaluaciones, flujos de administración de autorizaciones, políticas y procedimientos.
De tal forma, múltiples son las aristas hoy cubiertas por empresas de tecnología en el mundo legal, pero a la vez, debemos también considerar que los índices de adopción de tecnología por parte de abogados son aún muy bajos, lo que sumado a que el uso de este tipo de soluciones no se ha transformado en prioridad estratégica en empresas y estudios jurídicos, nos lleva a concluir que queda un largo camino por recorrer. Lo que es incuestionable, es que quienes no estén gestionando sus estrategias e incorporando soluciones de esta especie, incluso a título experimental, tienen un alto riesgo de quedarse atrás y perder la oportunidad de construir ventajas competitivas relevantes.
Andrés Jara, CEO Alster legal.