Transformación digital para la función legal

Alster, inició hoy la serie de webinars denominada “Transformación digital para la función legal”, con la asistencia de más de 250 participantes que disfrutaron de las ponencias de grandes actores del sector legal latinoamericano. El evento estuvo presentado por Andrés Jara, CEO Alster, y moderado por Rafael Mery, Director LATAM en Mirada 360°.

La sesión se caracterizó por su dinamismo y la presentación de ideas radicales para el sector legal, todo en un ambiente 100% virtual demostrando así que es posible generar espacios de valor para toda la comunidad latinoamericana en tiempos como los actuales.

La sesión inició con la exposición de Héctor Roldán, CEO & Founder en Simple Consulting, quien nos invitó a visualizar la velocidad con que se dan los cambios y el rol que tiene la tecnología en esto. Cerró con siete conceptos claves para abordar la transformación digital:

  1. reconocer la existencia de una brecha digital;
  2. la transformación digital es un proceso de múltiples dimensiones;
  3. la velocidad del cambio es exponencial;
  4. disrupción;
  5. estrategia y ejecución;
  6. la cultura como (des)ventaja competitiva, y
  7. liderazgo ambidiestro.

Janet Huerta, Fundadora de Abogado Digital, Academia de Innovación, abordó la transformación digital desde el enfoque de disrupción en la profesión legal. Entregó consejos para abordar los desafíos que impone la tecnología al sector legal e hizo hincapié en que en primer lugar se debe hacer un proceso de autoconocimiento, entender qué talentos y habilidades poseemos y desde ahí ver como la tecnología puede potenciarnos. Presentó además un esquema de la visión integral del abogado digital, donde conjugan la tecnología y  los datos para dar lugar a: Business of law, Law for Business, Law for technology y Technology for Law.

Cerró el ciclo de exposiciones Oscar Montezuma, Director en Niubox Legal, quien expuso sobre los cambios en los modelos de servicios legales. Partió mostrando un mapa de iniciativas new law y legaltech de la región y como estas van tomando fuerzas aunque aún en forma incipiente y conservadora. Predominan los softwares para la gestión de firmas de abogados y solo un 10% de las más de 400 iniciativas recabadas está soportada por inteligencia artificial, blockchain y big data.

El director de Niubox, destacó en su presentación la importancia del propósito como fuente de innovación e indicó que desde este enfoque se debe cuestionar el modelo tradicional basado netamente en rentabilidad, pues estos tienen foco exclusivo en usar las horas para generar rentabiliad pero esas mismas horas son necesarias para iterar procesos de innovación. Finalmente, el expositor hizo un llamado a repensar los modelos de venta de tiempo y animó a los asistentes a diseñar modelos de negocio con propósitos.

Todos los ponentes coincidieron en que el factor fundamental en un proceso de transformación digital e innovación son las personas y que particularmente en el sector legal los abogados son formados para mantener posturas conservadoras, hablar difícil y que esto es contrapuesto a trabajar en equipo y a estar cercano al cliente, por lo que el desafío para la comunidad e industria legal latinoamericana es aún mayor pero a la vez urgente.

Reconociendo esta necesidad es que hemos estructurado la sesión de webinars considerando los ejes: personas, procesos y tecnología. Mañana miércoles 5/08/202 a las 11 horas (UTC -4) tendremos la sesión: Personas | Gestión del cambio, Junto con Marcelo Blechman y Alejandro Goldstein de Olivia Consultoria.

 Puedes inscribirte a través de este link http://18.209.34.37/webinar-personas/

Comunicaciones | Alster 

Innovación en servicios legales ¿Es posible?

En los últimos años, las prioridades estratégicas de las organizaciones han estado enfocadas en la innovación y transformación digital, temas de los que no quedan exentos los departamentos legales debido a que el rubro legal enfrenta movimiento y evolución, pues los clientes externos e internos están cambiando rápidamente.

Los servicios legales tienen que adaptarse para continuar siendo apoyo y soporte dentro de este entorno cambiante, y es la innovación quizás una buena fórmula y metodología para abordar este contexto.

Durante febrero, tuve la fortuna de participar de uno de los eventos más importantes sobre tecnología para la industria legal, como lo es el Legalweek NYC 2020. Tremenda experiencia que me permitió reforzar mi conocimiento y la visión que desde Alster tenemos sobre las oportunidades y desafíos más relevantes que afectan hoy a los profesionales de la información, la tecnología y la gestión del conocimiento en firmas y departamentos legales.

Los diferentes paneles de Legalweek estuvieron enfocados en la innovación para  las áreas legales, pero, en mi experiencia como consultor de gerencias legales, puedo afirmar con certeza que la innovación en el rubro legal es algo complejo, en gran parte, porque la educación y formación de los abogados se sustenta en el control del riesgo, la aversión al mismo y la necesidad de mitigar las desviaciones respecto de potenciales resultados, lo que conlleva, obviamente, a cierta dificultad a la hora de cambiar y, es el cambio, la principal constante de la innovación.

Es un hecho de que no se puede pretender en el mundo actual el prestar un servicio de la misma manera, resolver los asuntos de igual forma o pensar que todo lo que hemos hecho en el pasado debe seguir haciéndose en el presente.

Entonces, hoy la innovación legal es casi una exigencia:

  • Debido a las presiones económicas que surgen desde los clientes internos y externos, hay exigencias de ser más estratégicos y eficientes.
  • La comparación en materia de innovación que ocurre en otros sectores del mercado o áreas de las organizaciones y que deben ser acompañados por el sector legal.
  • La rápida adopción y necesidad de data science y data analytics, como un catalizador que influye en la velocidad con la cual los diferentes sectores están innovando y transformándose digitalmente.
  • El interés de muchos abogados de centrarse en la abogacía de alto nivel y no en tareas mundanas repetitivas que de otro modo podrían ser automatizadas.

Probablemente, una de las reacciones habituales que tengo oportunidad de observar en nuestros clientes es la frustración y temor porque la palabra innovación implica cambios mayores en conductas y acciones. Sin embargo, ¿creen Uds. que la innovación sólo se restringe a grandes pasos?

Quizás, para sorpresa de algunos, la respuesta es: no.

La innovación puede suceder en pequeñas cosas del día a día. Se debe pensar en innovación todo el tiempo, procesos que ejecutamos de forma cotidiana, procedimientos internos o cómo ofrecemos servicios. No es necesariamente encontrar algo nuevo, sino una nueva manera de hacerlo más simple, más rápida o eficiente algo que veníamos haciendo.

Pero ¿Por dónde comenzar a innovar?
  • En primera instancia, es necesario ser conscientes que la innovación es algo que debe y puede surgir de cualquier miembro del departamento legal o firma y no esperar que la innovación sea algo que surja de las personas con perfiles tecnológicos.
  • En segundo lugar, el uso de metodologías ágiles son extremadamente útiles para proyectos de innovación, un ejemplo de ello es el caso del design thinking.
  • Por último, es importante evaluar el tiempo adecuado para innovar y hacer uso de pilotos y pruebas de conceptos.

Según el artículo de Forbes Understanding The Agile Mindset, los profesionales tienen una mentalidad ágil cuando están preocupados y, a veces, obsesionados con innovar y ofrecer un mayor valor para el cliente. Como consecuencia, aquellas organizaciones adquieren la capacidad de adaptarse rápidamente a un mercado que cambia, desarrollando ventajas competitivas que haya sustento en su comportamiento.

Una de las metodologías ágiles que cada día vemos más aplicada para abordar los desafíos legales que enfrentan las organizaciones es el Design Thinking.

Este método es un proceso de resolución de problemas que comienza con la comprensión de las necesidades no satisfechas del cliente. A partir de ese conocimiento, se fusiona con un proceso de innovación que abarca el desarrollo de conceptos, la creación de prototipos y la experimentación.

Cuando Design Thinking es aplicado a las empresas, la tasa de éxito de proyectos de innovación mejora sustancialmente.

Al aplicar Design Thinking abogados y áreas legales pueden, con claridad y dinamismo, definir prioridades, idear, prototipar e implementar nuevas formas de hacer las cosas, equivocándose en ambientes controlados y permitiendo con ello mitigar los riesgos que el cambio implica.

En Alster, hemos tenido la oportunidad de trabajar con prestigiosas empresas en la mejora de sus procesos legales y en cómo dichos procesos pueden ser objeto de transformación digital. En cada uno de esos desafíos buscamos aplicar estos métodos, de forma de asegurar una mejor reacción frente a los cambios y así garantizar el éxito del proyecto.

Por lo mismo, acá algunos tips de lo que lo que hemos aprendido con estas experiencias:

  • Muchos profesionales del derecho toman conocimiento de la relevancia de la innovación y buscan a partir de ello crear valor para sus clientes y empleados, el gran obstáculo es liderar esos procesos y, en ello, el uso de metodologías como la descrita pueden ser de gran utilidad.
  • La innovación legal no se limita a la implementación de nuevas tecnologías; también se trata de adoptar nuevas estrategias y usar metodologías comprobadas de otros sectores.
  • No hay un camino profesional para convertirse en un experto de la innovación legal, la práctica hace al maestro.
  • Seleccionar los procesos críticos y abordar cada uno como un proyecto individual permitirá ser mucho más efectivo.
  • Seleccionado que sea el proceso, , dibujarlo (literalmente) será de gran utilidad, para luego buscar dónde es objeto de modificación.
  • Cuando se haya refinado el , hay que probarlo con clientes modelos. Hacer un piloto que reduzca el riesgo y, solo entonces, con todos los aprendizajes, se puede pensar en automatizar y hacer más eficiente.

Los invito a conocer más sobre nuestros servicios de consultoría legal y transformación digital ingresando a local.alster.law

Por Guillemo Teibo, CIO en Alster Legal