Transformación digital para la función legal

Alster, inició hoy la serie de webinars denominada “Transformación digital para la función legal”, con la asistencia de más de 250 participantes que disfrutaron de las ponencias de grandes actores del sector legal latinoamericano. El evento estuvo presentado por Andrés Jara, CEO Alster, y moderado por Rafael Mery, Director LATAM en Mirada 360°.

La sesión se caracterizó por su dinamismo y la presentación de ideas radicales para el sector legal, todo en un ambiente 100% virtual demostrando así que es posible generar espacios de valor para toda la comunidad latinoamericana en tiempos como los actuales.

La sesión inició con la exposición de Héctor Roldán, CEO & Founder en Simple Consulting, quien nos invitó a visualizar la velocidad con que se dan los cambios y el rol que tiene la tecnología en esto. Cerró con siete conceptos claves para abordar la transformación digital:

  1. reconocer la existencia de una brecha digital;
  2. la transformación digital es un proceso de múltiples dimensiones;
  3. la velocidad del cambio es exponencial;
  4. disrupción;
  5. estrategia y ejecución;
  6. la cultura como (des)ventaja competitiva, y
  7. liderazgo ambidiestro.

Janet Huerta, Fundadora de Abogado Digital, Academia de Innovación, abordó la transformación digital desde el enfoque de disrupción en la profesión legal. Entregó consejos para abordar los desafíos que impone la tecnología al sector legal e hizo hincapié en que en primer lugar se debe hacer un proceso de autoconocimiento, entender qué talentos y habilidades poseemos y desde ahí ver como la tecnología puede potenciarnos. Presentó además un esquema de la visión integral del abogado digital, donde conjugan la tecnología y  los datos para dar lugar a: Business of law, Law for Business, Law for technology y Technology for Law.

Cerró el ciclo de exposiciones Oscar Montezuma, Director en Niubox Legal, quien expuso sobre los cambios en los modelos de servicios legales. Partió mostrando un mapa de iniciativas new law y legaltech de la región y como estas van tomando fuerzas aunque aún en forma incipiente y conservadora. Predominan los softwares para la gestión de firmas de abogados y solo un 10% de las más de 400 iniciativas recabadas está soportada por inteligencia artificial, blockchain y big data.

El director de Niubox, destacó en su presentación la importancia del propósito como fuente de innovación e indicó que desde este enfoque se debe cuestionar el modelo tradicional basado netamente en rentabilidad, pues estos tienen foco exclusivo en usar las horas para generar rentabiliad pero esas mismas horas son necesarias para iterar procesos de innovación. Finalmente, el expositor hizo un llamado a repensar los modelos de venta de tiempo y animó a los asistentes a diseñar modelos de negocio con propósitos.

Todos los ponentes coincidieron en que el factor fundamental en un proceso de transformación digital e innovación son las personas y que particularmente en el sector legal los abogados son formados para mantener posturas conservadoras, hablar difícil y que esto es contrapuesto a trabajar en equipo y a estar cercano al cliente, por lo que el desafío para la comunidad e industria legal latinoamericana es aún mayor pero a la vez urgente.

Reconociendo esta necesidad es que hemos estructurado la sesión de webinars considerando los ejes: personas, procesos y tecnología. Mañana miércoles 5/08/202 a las 11 horas (UTC -4) tendremos la sesión: Personas | Gestión del cambio, Junto con Marcelo Blechman y Alejandro Goldstein de Olivia Consultoria.

 Puedes inscribirte a través de este link http://18.209.34.37/webinar-personas/

Comunicaciones | Alster 

Innovación en servicios legales ¿Es posible?

En los últimos años, las prioridades estratégicas de las organizaciones han estado enfocadas en la innovación y transformación digital, temas de los que no quedan exentos los departamentos legales debido a que el rubro legal enfrenta movimiento y evolución, pues los clientes externos e internos están cambiando rápidamente.

Los servicios legales tienen que adaptarse para continuar siendo apoyo y soporte dentro de este entorno cambiante, y es la innovación quizás una buena fórmula y metodología para abordar este contexto.

Durante febrero, tuve la fortuna de participar de uno de los eventos más importantes sobre tecnología para la industria legal, como lo es el Legalweek NYC 2020. Tremenda experiencia que me permitió reforzar mi conocimiento y la visión que desde Alster tenemos sobre las oportunidades y desafíos más relevantes que afectan hoy a los profesionales de la información, la tecnología y la gestión del conocimiento en firmas y departamentos legales.

Los diferentes paneles de Legalweek estuvieron enfocados en la innovación para  las áreas legales, pero, en mi experiencia como consultor de gerencias legales, puedo afirmar con certeza que la innovación en el rubro legal es algo complejo, en gran parte, porque la educación y formación de los abogados se sustenta en el control del riesgo, la aversión al mismo y la necesidad de mitigar las desviaciones respecto de potenciales resultados, lo que conlleva, obviamente, a cierta dificultad a la hora de cambiar y, es el cambio, la principal constante de la innovación.

Es un hecho de que no se puede pretender en el mundo actual el prestar un servicio de la misma manera, resolver los asuntos de igual forma o pensar que todo lo que hemos hecho en el pasado debe seguir haciéndose en el presente.

Entonces, hoy la innovación legal es casi una exigencia:

  • Debido a las presiones económicas que surgen desde los clientes internos y externos, hay exigencias de ser más estratégicos y eficientes.
  • La comparación en materia de innovación que ocurre en otros sectores del mercado o áreas de las organizaciones y que deben ser acompañados por el sector legal.
  • La rápida adopción y necesidad de data science y data analytics, como un catalizador que influye en la velocidad con la cual los diferentes sectores están innovando y transformándose digitalmente.
  • El interés de muchos abogados de centrarse en la abogacía de alto nivel y no en tareas mundanas repetitivas que de otro modo podrían ser automatizadas.

Probablemente, una de las reacciones habituales que tengo oportunidad de observar en nuestros clientes es la frustración y temor porque la palabra innovación implica cambios mayores en conductas y acciones. Sin embargo, ¿creen Uds. que la innovación sólo se restringe a grandes pasos?

Quizás, para sorpresa de algunos, la respuesta es: no.

La innovación puede suceder en pequeñas cosas del día a día. Se debe pensar en innovación todo el tiempo, procesos que ejecutamos de forma cotidiana, procedimientos internos o cómo ofrecemos servicios. No es necesariamente encontrar algo nuevo, sino una nueva manera de hacerlo más simple, más rápida o eficiente algo que veníamos haciendo.

Pero ¿Por dónde comenzar a innovar?
  • En primera instancia, es necesario ser conscientes que la innovación es algo que debe y puede surgir de cualquier miembro del departamento legal o firma y no esperar que la innovación sea algo que surja de las personas con perfiles tecnológicos.
  • En segundo lugar, el uso de metodologías ágiles son extremadamente útiles para proyectos de innovación, un ejemplo de ello es el caso del design thinking.
  • Por último, es importante evaluar el tiempo adecuado para innovar y hacer uso de pilotos y pruebas de conceptos.

Según el artículo de Forbes Understanding The Agile Mindset, los profesionales tienen una mentalidad ágil cuando están preocupados y, a veces, obsesionados con innovar y ofrecer un mayor valor para el cliente. Como consecuencia, aquellas organizaciones adquieren la capacidad de adaptarse rápidamente a un mercado que cambia, desarrollando ventajas competitivas que haya sustento en su comportamiento.

Una de las metodologías ágiles que cada día vemos más aplicada para abordar los desafíos legales que enfrentan las organizaciones es el Design Thinking.

Este método es un proceso de resolución de problemas que comienza con la comprensión de las necesidades no satisfechas del cliente. A partir de ese conocimiento, se fusiona con un proceso de innovación que abarca el desarrollo de conceptos, la creación de prototipos y la experimentación.

Cuando Design Thinking es aplicado a las empresas, la tasa de éxito de proyectos de innovación mejora sustancialmente.

Al aplicar Design Thinking abogados y áreas legales pueden, con claridad y dinamismo, definir prioridades, idear, prototipar e implementar nuevas formas de hacer las cosas, equivocándose en ambientes controlados y permitiendo con ello mitigar los riesgos que el cambio implica.

En Alster, hemos tenido la oportunidad de trabajar con prestigiosas empresas en la mejora de sus procesos legales y en cómo dichos procesos pueden ser objeto de transformación digital. En cada uno de esos desafíos buscamos aplicar estos métodos, de forma de asegurar una mejor reacción frente a los cambios y así garantizar el éxito del proyecto.

Por lo mismo, acá algunos tips de lo que lo que hemos aprendido con estas experiencias:

  • Muchos profesionales del derecho toman conocimiento de la relevancia de la innovación y buscan a partir de ello crear valor para sus clientes y empleados, el gran obstáculo es liderar esos procesos y, en ello, el uso de metodologías como la descrita pueden ser de gran utilidad.
  • La innovación legal no se limita a la implementación de nuevas tecnologías; también se trata de adoptar nuevas estrategias y usar metodologías comprobadas de otros sectores.
  • No hay un camino profesional para convertirse en un experto de la innovación legal, la práctica hace al maestro.
  • Seleccionar los procesos críticos y abordar cada uno como un proyecto individual permitirá ser mucho más efectivo.
  • Seleccionado que sea el proceso, , dibujarlo (literalmente) será de gran utilidad, para luego buscar dónde es objeto de modificación.
  • Cuando se haya refinado el , hay que probarlo con clientes modelos. Hacer un piloto que reduzca el riesgo y, solo entonces, con todos los aprendizajes, se puede pensar en automatizar y hacer más eficiente.

Los invito a conocer más sobre nuestros servicios de consultoría legal y transformación digital ingresando a local.alster.law

Por Guillemo Teibo, CIO en Alster Legal

 

 

La experiencia del reto de innovar en el mercado legal

Innovar en el mercado legal por esencia conservador, no ha estado exento de dificultades y ha requerido de motivación, pasión e inspiración. Andrés Jara, CEO de Alster Legal reflexiona acerca de su experiencia a lo largo de estos 4 años liderando una empresa de servicios legales, tomando la bandera y el propósito de transformarla.

“La NASA entregó 69 millones de dólares a SpaceX, una empresa del emprendedor serial Elon Musk, para llevar adelante un programa que sea capaz de desviar meteoros que pudiesen acercarse a la tierra peligrosamente” publicaba la revista Entrepeneur el 16 de abril pasado.

Nada más cercano a la serie Salvation, en donde participa el chileno Santiago Cabrera como Darious Tanz, un gran emprendedor y visionario que ha construido una nave espacial para salvar a la humanidad.

Ambos personajes, uno del mundo real y otro del mundo ficticio, son capaces de inspirar con su visión y demuestran que con perseverancia y pasión, es posible impulsar cambios en industrias dominadas desde hace años por los programas estatales y empresas tradicionales, globales, con gran capacidad financiera, tamaño y experiencia.

¿Qué relación tiene esto con aquellas materias sobre las que habitualmente escribo? Les diría que mucha.

En efecto, como emprendedor en una industria tradicional, dominada por empresas o estudios jurídicos tradicionales que durante años han liderado el mercado de servicios legales y en donde las prácticas y modelos de negocios no han variado en años, claramente me identifico con Musk y Tanz.

Es más, me inspiro por su pasión y empuje en buscar la disrupción de espacios que estaban comúnmente reservados para los que durante años dominaron estas esferas.

Innovar y emprender no es un juego, es una profesión que requiere arduo trabajo, costos personales y emocionales, pero que entrega un resultado gratificante y, que se siente y vive, todos los días.

Ciertamente no soy quién para dar lecciones sobre este tema, hay grandes emprendedores que han recorrido mucho más camino que yo, pero si creo que puedo aportar con algo de la experiencia que ha significado construir una empresa en una industria adversa, conservadora y reticente a los cambios, como lo es la industria de los servicios legales.

Efectivamente, la experiencia de diseñar un modelo de negocios diferente en la industria de servicios legales, apalancado en tecnología y en un entorno extremadamente competitivo, creo que permite transmitir enseñanzas. A continuación, expondré un resumen de los 8 factores que han sido relevantes en nuestro viaje.

1. Aprendizaje permanente.

Lo que hemos aprendido durante estos años de desarrollo de ALSTER es mucho, las equivocaciones han sido múltiples y los desafíos diarios.

Sin embargo, cada minuto invertido en este viaje ha valido la pena. No han sido pocas las barreras con las que nos hemos topado desde el inicio de nuestra empresa, pero tampoco han sido pocas las gratificaciones que hemos tenido en el proceso.

Podemos expresar que el aprendizaje continuo ha sido esencial para sostener el crecimiento y desarrollo de nuestra empresa.

Si ya es extraño hablar de industria de servicios legales, más extraño aún es tomar la bandera y propósito de transformarla.
2. Artesanos versus ingenieros.

Si ya es extraño hablar de industria de servicios legales, más extraño aún es tomar la bandera y propósito de transformarla.

Los abogados durante siglos se han sentido más cercanos a los artesanos que a los ingenieros, y ciertamente, han asimilado su trabajo siempre a obras de arte más que a procesos productivos eficientes.

Hablar de commodities en el mercado legal ha sido siempre mal visto e, incluso, criticado por muchos que estiman que su trabajo no puede ser tildado de tal.

Sin embargo, lo mismo decían los analistas financieros, los médicos, los profesores, los contadores y muchos otros que han visto cómo por medio de la tecnología, sus áreas tradicionales de práctica han mutado a espacios optimizados, con recursos acotados, con clientes que demandan eficiencia y demostración empírica de que sus resultados agregan valor.

Son tales profesiones las que han observado también un cambio radical en la forma en que eran ejecutadas y comercializadas. En la medida que los clientes incorporan habilidades digitales y profesionalizan su administración y modelo de servicio, éstos requieren que sus proveedores se alineen con tal estrategia.

En ese curso, nuestra experiencia es que las capacidades y métodos del ingeniero surten mejores efectos que los del artesano.

3. La voz del cliente

Precisamente, es en el momento en que profundizamos en el entendimiento de las necesidades que nuestros clientes o prospectos manifiestan, cuando surgen oportunidades de negocio y servicio.

El entendimiento del cliente en un mercado como el legal resulta sustancial para el éxito de cualquier modelo de servicios. La cercanía y el feedback permanente han de constituir máximas en aquellas relaciones.

Si somos capaces de construir productos o servicios basados en la voz del cliente, es muy probable que éstos puedan conectarlo con sus necesidades y llevarlo a tomar una decisión favorable de compra.

4. La comunicación como un elemento fundamental de la relación.

Por otro lado, en cualquier modelo de negocios centrado en el cliente, resulta fundamental que los canales de comunicación estén activos. Somos nosotros quienes debemos captar la información, pero no solo eso, sino también procesarla, entenderla, inducir basados en ella y encontrar soluciones apropiadas.

En este mismo sentido, la construcción de modelos mínimo-viables, el pivoteo y la experiencia en el hacer, garantizarán que los productos o servicios puedan satisfacer de mejor forma las necesidades reales.

5. Los errores como fuente de oportunidad.

En nuestro camino hemos aprendido de los errores y también definido que éstos constituyen una base fundamental del crecimiento como empresa. Si nos equivocamos significa que lo intentamos, un primer gran paso.

Luego, si somos capaces de educarnos sobre la base de dichos errores, significa que podemos modificar conductas, servicios y productos, y aspirar a mejorar la calidad y adaptabilidad de nuestra oferta a la demanda.

6. Segmentación como base de la propuesta de valor.

Otro gran aprendizaje ha sido el identificar de forma adecuada la audiencia a la que nuestra propuesta de valor hace sentido.

Un mensaje coherente, con propósito e intención, permite sin duda mejor recepción y, sobre todo, la posibilidad de trabajar con clientes que valoran la doctrina del entendimiento y la compenetración.

Mientras más simbióticos seamos con las expectativas de nuestros clientes, mejores relaciones seremos capaces de construir. Con todo, no debemos olvidar que somos un prestador de servicios más y no un socio del negocio, como muchos en el mercado legal dicen ser.

7. Tecnología y augmentation.

Sin duda, uno de los grandes aciertos, pero también de los grandes desafíos que hemos enfrentado en ALSTER, ha sido la selección de las tecnologías requeridas para garantizar el mejor servicio y experiencia para nuestros clientes.

La tecnología es el sustento de nuestro modelo de negocios y resulta clave para construir la empresa que soñamos y crecer de la forma que pretendemos hacerlo. La incorporación de expertos en la materia ha sido una de las prioridades que ha marcado nuestra agenda estratégica, sin ello no es eficiente ni viable desarrollar el potencial de escalabilidad del negocio.

En nuestra mente, la combinación de escalabilidad e inversión controlada no es factible sin la tecnología adecuada. Romper el paradigma de que un prestador de servicios legales requiere solo abogados como su vector de éxito, estimamos es un error.

Precisamente ello es lo que nos llevó a tener un Chief Information Officer y construir un equipo enfocado en la integración y desarrollo de las mejores tecnologías disponibles en el mercado, sin temerle a la inversión real en ellas.

En este sentido, la palabra “augmentation” me parece apropiada, pues las tecnologías hoy disponibles contribuyen a la productividad, la experiencia del cliente, la transparencia y la certeza en las relaciones comerciales, todos atributos fundamentales para cumplir con el propósito de transformar la industria de servicios legales de Latinoamérica y aumentar las posibilidades de acierto.

8. Equipo, factor crítico de éxito

A lo largo de mi vida profesional he sido testigo del costo que tiene ser un llanero solitario y, especialmente, de trabajar de forma no colaborativa. Esto parte con la formación universitaria de los abogados, con metodologías que no fomentan el trabajo en equipo, sino por el contrario alientan la competitividad y autosuficiencia. Solo hasta esta experiencia pude internalizar realmente la relevancia del equipo como pieza clave del éxito de una organización.

La formación y consolidación del equipo ha sido un gran desafío, sin embargo, reconozco que en la medida que encuentras a las personas correctas, no hay límites en cuanto a todo lo que se puede lograr. Como bien dicen, uno solo puede llegar más rápido, pero en equipo se llega más lejos.

Hoy vivimo en la era del WeQ y no del IQ, como me comentara hace algunos días Allan Urban, un experto en diseño creativo. Lo que se puede lograr con un equipo coordinado, multidisciplinario, responsable y “doer” es formidable y si, sorpresa, en ALSTER no somos muchos abogados.

Finalmente, puedo concluir que las empresas no se crean por arte de magia ni por oportunismo, menos si éstas se insertan en mercados tradicionales. Las empresas se crean con determinación, tiempo, constancia, pasión y humildad. Hoy puedo manifestar con certeza que al ALSTER del mañana, le depara un gran futuro y ello es en gran medida gracias a los elementos que he esbozado en esta nota.

Los invito a ser parte de la historia, como advisors o como audiencia, y ser parte del proceso de transformación del mercado legal latinoamericano.

Andrés Jara | CEO Alster Legal

ajara@18.209.34.37

Todo lo que la gerencia legal debería saber sobre transformación digital

Muchos han escuchado hablar de transformación digital y quizás convenga entender este concepto y explorar los beneficios de incorporar tecnología en un departamento legal.

La transformación digital es el uso de la tecnología para mejorar radicalmente el rendimiento o alcance de una organización o área, y esto incluye a su gente. Permite mantenerse competitivo en la economía moderna y digital.

Como área de servicio, el departamento legal, gracias a la tecnología, podría interactuar en forma más efectiva con sus clientes internos y brindar un servicio más eficiente. Básicamente, podrían hacer las cosas más rápido y mejor.

Antes de seguir avanzando, resulta clave precisar que invertir en tecnología no es transformación digital. El reto está en el cambio, en la transformación, no en la inversión en dinero o tiempo. Los procesos de incorporación de tecnología en general fracasan o quedan rezagados por solo cambiar el proceso y no invertir en el cambio de mentalidad de las personas que conlleve la construcción de una cultura que fomente la transformación. La gestión del cambio es fundamental para asegurar el éxito de la inversión en tecnología.

Qué tiene que ver transformación digital y el área legal de una organización

Los abogados internos de las empresas muchas veces son percibidos como las piedras de tope en la adopción de nuevas tecnologías y la evolución a plataformas p.ej. Cloud. Por lo mismo, el rol de las gerencias legales en las empresas en este aspecto es crucial y constituyen facilitadores de cambio.

Incorporar tecnología no solo es clave para departamentos legales de grandes empresas, sino que también es una herramienta para áreas conformadas por pocos miembros, inclusive resulta más útil para estas últimas. La consigna siempre es cómo hacer más con menos, especialmente considerando que el trabajo legal incrementa como consecuencia del aumento de la regulación, la mayor velocidad del mercado y mayor exposición al riesgo por globalización.

Lo anterior, requiere que se analice qué trabajos dejar dentro de la gerencia legal y qué eliminar o externalizar. Entender que la tecnología simplifica los procesos, elimina intermediaciones que no agregan valor y hace más accesible la información, es entender que de esta manera el área legal satisface las nuevas demandas de sus clientes internos y acompaña los tiempos del negocio.

Algunas aplicaciones de transformación digital en procesos o servicios del departamento legal son:

  • Generación de documentos estándar utilizando herramientas o softwares de automatización de documentos y gestión de contratos.
  • Gestión del conocimiento por medio de plataformas de colaboración y co-creación de documentos.
  • Respuestas a entidades públicas por medio de softwares de respuesta automáticas a oficios.
  • Evaluación de contratos vía machine learning.
  • Ingreso de datos por medio de la externalización de tareas. Debido a que la entrada de datos es tan simple y el software funciona automáticamente es más fácil asignar la tarea de completar los datos y requiere menos supervisión de un abogado categoría senior.
Consejo clave: Invertir en las personas y en la comunicación

El mejor consejo para el uso exitoso de la tecnología en aras de mejorar el desempeño de la práctica legal es centrarse en las personas. Esto incluye a todos los involucrados y niveles jerárquicos.

Para cambiar el comportamiento de las personas los líderes de área pueden enfocarse en comunicar estos dos mensajes:

  • Todos somos humanos y como seres humanos cometemos errores, esto es así, incluso si somos muy hábiles y experimentados en lo que estamos entrenados para hacer. El error humano es un riesgo muy real.
  • La digitalización de procesos, como la automatización, permite que los departamentos legales ejecuten tareas más estratégicas y de alto valor. Esto significa, por ejemplo, que los abogados están más motivados ya que realizan tareas menos repetitivas; es menos probable que estén en posición de cometer errores; y pueden usar y desarrollar su talento en “trabajo legal real”.

Takeaways: La incorporación de tecnología permite hacer más con menos, siendo una receta que funciona en departamentos legales de todos los tamaños. La clave de cualquier proyecto de transformación digital está en el proceso de transformación de las personas que integran el área, por lo que resulta esencial comunicar los beneficios y entender que el abogado interno agrega valor no en tareas repetitivas, sino en aquellas materias que permiten llevar adelante los negocios. Se requiere repensar cómo se hacen las cosas dentro del área y desarrollar las acciones correctivas correspondientes.

Montserrat Mazó | Head of Consulting |Alster

Claves para la transformación digital de un área legal: El caso de Telefónica Argentina

En el marco del último Legal Forum del año, encuentro organizado por Alster Legal y apoyado por Microsoft, tuvimos el privilegio de contar con la participación de Juan Manuel Haddad, Gerente Legal de Telefónica Argentina, quien lideró el proyecto de digitalización del departamento de legales del Grupo Telefónica.

En el encuentro Haddad realizó una exposición, sobre su experiencia en la implementación de tecnología en los procesos del área legal, profundizando en cuáles fueron los principales errores y desafíos que conllevó el cambio. Entre ellos destacó que el proceso, iniciado el 2009 con la digitalización de los oficios legales y la construcción de bases de datos, no estuvo exento de equivocaciones, siendo el principal tope la falta de alineamiento de la dirección de la compañía al proyecto de transformación.

Una vez alineada la cultura empresarial, la lógica utilizada para definir dónde implementar las herramientas de transformación digital para Haddad fue muy simple, “si es una labor repetitiva y aburrida, es un trabajo que puede eficientarse a través del uso de herramientas de automatización”. El área legal de Telefónica Argentina concentra el 60% de su gestión en oficios judiciales, el 34% a conflictos con clientes y el 7%  a documentación.

 Así, el primer desarrollo se realizó en conjunto con la Enacom (Ente Nacional de Comunicaciones en Argentina) aquí el área legal de Telefónica propuso a la institución enlaces de trabajo conjunto con el fin de recibir de manera inmediata a través de una plataforma los reclamos. Con esto no sólo se acortaban los pasos para la solución de conflictos sino que además se obtenía la data, la cual, fue recopilada y trabajada con el fin de construir bases de datos que les permitiese implementar acciones digitales fácilmente.

Una experiencia similar pero aún con mayor impacto ocurrió con la creación de un portal en donde los juzgados de toda Argentina pudiesen gestionar, no solo los oficios judiciales, sino extraer información vital y de manera inmediata, por ejemplo, para casos de secuestros, la herramienta tuvo un gran impacto en el rol que cumplía la empresa y sus políticas de responsabilidad social. 

Para Juan Manuel Haddad, las claves para generar este tipo de transformación son dos. La primera está en la construcción de data que permita realizar procesos de transformación digital y la segunda en el liderazgo y estrategia para generar un cambio de mentalidad en un departamento de legal  y con él, el involucramiento de toda la empresa.

Comunicaciones | Alster